El Anillo Vial Metropolitano (AVM) comienza a perfilarse como una de las obras más relevantes para el futuro de Mérida y su zona conurbada. El proyecto, vinculado directamente con el Tren Maya de carga y los nuevos corredores industriales del estado, busca convertirse en una alternativa al actual Periférico y en una pieza clave para la movilidad y el crecimiento económico de Yucatán en la próxima década.
Las autoridades estatales aseguran que la iniciativa no solo pretende aligerar el tránsito, sino también reorganizar la manera en que circulan mercancías y se conectan los polos productivos, en un momento en el que la región experimenta una acelerada expansión industrial. Ante este contexto, el AVM se posiciona como un corredor capaz de integrar infraestructura federal, estatal y privada bajo un mismo esquema de planeación.
La obra, que actualmente se encuentra en análisis técnico y en revisión legislativa, avanza conforme al calendario planteado, de acuerdo con la Secretaría de Infraestructura para el Bienestar. Esta etapa es crucial para poder definir los trazos finales, las fuentes de financiamiento y el modelo de implementación que acompañará a la infraestructura ferroviaria y logística que se desarrolla en Yucatán.
Revisión técnica, ruta legislativa y coordinación con el Tren Maya
La titular de la dependencia, Alaine López Briceño, informó que el trazo preliminar ya fue evaluado por los equipos técnicos y que los expedientes están siendo turnados al Congreso del Estado para su estudio. Esta revisión definirá la viabilidad normativa y presupuestal de la obra, planteada como una alternativa al Periférico que permita responder al aumento del parque vehicular y al crecimiento urbano del área metropolitana.
La funcionaria explicó que se espera que Yucatán pueda iniciar su participación directa a partir de 2026, en conjunto con el Gobierno Federal, dado que el proyecto está diseñado para complementar la ruta del Tren Maya de carga. Esta coordinación permitirá redirigir el flujo pesado que actualmente ingresa a Mérida y mejorar la eficiencia del movimiento de mercancías hacia los corredores logísticos y el Puerto de Altura.
Inversión en análisis y obra orientada al crecimiento económico
Sobre los costos de la primera etapa, López Briceño señaló que los montos aún se encuentran en revisión, ya que dependerán del Presupuesto de Egresos 2026. El Congreso del Estado será el encargado de determinar la asignación final, una vez que concluya la integración financiera del proyecto. La dependencia prevé contar con cifras claras en los próximos meses para programar las fases de construcción.
El Anillo Vial Metropolitano aprovechará derechos de vía existentes y se conectará con zonas donde se proyectan nuevos parques industriales. Además de mejorar la movilidad, la obra tiene como propósito fortalecer la integración entre el Tren Maya de carga, los Corredores del Bienestar y la infraestructura empresarial en desarrollo. Con ello, el gobierno estatal apuesta por un modelo de crecimiento ordenado que impulse la competitividad logística de Yucatán.