Los papadzules son un antojito yucateco que incluye tortillas de maíz, fritas, bañadas de salsa de pepita de calabaza, rellenas de huevo cocido y con un toque de salsa de jitomate con chile habanero.
De acuerdo con el diccionario gastronómico Larousse, existe la creencia de que en tiempos prehispánicos, los papadzules se rellenaban con huevos de codorniz o de alguna gallina de monte.
También existen los papadzules negros, aunque son menos populares y se preparan con frijoles colados en lugar se salsa de pepita.
¿Qué tan saludables con los papadzules?
Respecto a qué tan saludables son los papadzules, el nutriólogo Miguel Ángel Martínez, quien es originario de Yucatán, dice que es un platillo generoso con la salud.
En su cuenta de Facebook dice que contiene carbohidratos buenos con las tortillas; es alto en proteínas, por el huevo; y tiene grasa buena aportada por las pepitas de calabaza.
Señala que es un alimento completo, recomendado para alguien que está cambiando sus hábitos o quiere mejorar su salud. Eso sí, si cualquiera come entre 16 y 20 piezas en una sola comida, seguramente subirá de peso, aunque sea un platillo saludable. Como cualquier nutriólogo, recomienda equilibrar la dieta y hacer ejercicio.
Bien calificado
Este platillo tradicional maya tiene muchísimos años siendo consumido y aquí te contamos sobre él.
Taste Atlas, la enciclopedia gastronómica que se encarga de evaluar los platillos más icónicos del mundo otorga a los papadzules una calificación de 4.2 estrellas de 5.
Los papadzules tienen un sabor profundo y una historia rica que refleja la mezcla de culturas prehispánicas y europeas.
Así se preparan
La elaboración de los papadzules comienza con la salsa de semillas de calabaza, conocida como “ek xik”. Para prepararla, se muelen las semillas de calabaza peladas hasta obtener una pasta suave, que luego se diluye con agua hasta alcanzar una consistencia similar a la de una salsa. Esta mezcla se sazona con sal y, en algunas versiones, con un toque de epazote, una hierba aromática típica de la región. La salsa se calienta ligeramente antes de usarla para bañar las tortillas de maíz, dándoles un color característico verde pálido.
El relleno de los papadzules es tradicionalmente de huevo cocido picado. Los huevos se hierven, se pelan y se cortan en trozos antes de colocarlos en el centro de las tortillas fritas, ya remojadas la salsa de semillas de calabaza. Las tortillas se enrollan cuidadosamente, asegurando que el relleno quede bien envuelto.
Finalmente, se prepara una salsa de tomate fresco para cubrir los papadzules. Se prepara con tomates rojos molidos, cebolla, ajo y cilantro, ingredientes que se cocinan juntos hasta obtener una consistencia ligeramente espesa. Al servir, los papadzules se bañan en esta salsa de tomate, agregando un contraste de color y sabor.
Los papadzules no solo destacan por su combinación de sabores delicados y texturas suaves, sino también por su simbolismo cultural. Representan una receta que ha sobrevivido y se ha adaptado a través de los siglos, manteniendo vivas las tradiciones culinarias de la región.
Información nutricional
- 551.3 kcal = 2,305kj /por porción
- Carbohidratos 46.4 g
- Energía 551.3 kcal